lunes, 21 de febrero de 2011

XX CAYÚ. BENIMASSOT


Desde el fin de año de 2009 no habíamos organizado un Cayú de fin de semana. En aquellas ocasión estuvimos en Gandía y en esta en Benimassot; localidad alicantina situada en la comarca de El Comtat. Como campos base hemos disfrutado del Hostal Rural Cantacuc y la casa rural La bodega.
El sábado hicimos una excursión por el Barranco de la Encantada hasta la localidad de Planes. Junto al Pont de Calders, en la CV-700, comienza la pista de la Encantada y allí empezó nuestro recorrido. La primera parada la hicimos en el Gorg del Salt, el lugar más conocido de este rincón. Esta no es la época del año más recomendable para visitar el lugar, ya que el caudal de agua no es muy abundante. Aún así el lugar tiene un encanto especial.
Retomada la pista principal seguimos las indicaciones del Molí de la Encantada. Desde alguna edificación en ruinas se pueden ver las numerosas pozas que va formando el barranco. Junto a una de estas ruinas hicimos la pertinente parada para almorzar y, en este caso, disfrutar de la piñata que nos había preparado María para celebrar su reciente cumpleaños.
Pasado el molino, la senda se va estrechando y comienza a ascender al mismo tiempo que se va separando del barranco. La subida termina junto a una casa situada en un collado desde el que aparece una vista increible. Delante de nosotros el embalse de Beniarres y la Serra del Benicadell. Si continuamos mirando hacia nuestra izquierda, se suceden el Port d'Albaida, Muro d'Alcoi, la Serra Mariola con el querido Montcabrer vigilante, Cocentaina y, al fondo, la Serra del Menejador que aloja el Parque de la Font Roja. ¡Alguien da más!
A partir de aquí cambiamos el paisaje montano por el agrícola. En esta época del año los almendros en flor nos ofrecen todo un espectáculo visual. Rodeados de esta sinfonía de colores y olores, llegamos a Planes de la Baronía y su castillo. FOTOS AQUÍ.
Después de comer en un bar del pueblo, regresamos a Benimassot. Tras una siesta reparadora y alguna carrerita por los alrededores, comenzamos los reparativos de la fabulosa, espectacular, impresionante... ¡¡FIESTA DE DISFRACES!! No hace falta insistir mucho en que los niños y los no tan niños disfrutaron de lo lindo. Como colofón de la fiesta, pudimos disfrutar de los regalitos que iban saliendo en el espectacular paquetón que nos habían preparado. Bueno, en realidad se lo habían preparado a los niños y los regalos también fueron para ellos, pero los adultos disfrutamos como enanos. AQUÍ podéis verlo claramente.

Para el domingo preparamos una excursión circular que partía de Beniaia y recorría el Paratge Natural del Condoig. Al carecer de indicaciones o, para ser más exactos, no disponer de las necesarias, tuvimos que tirar de tecnología GPS. La primera parte del recorrido nos lleva, tras pasar junto al lavadero, al despoblado morisco de La Queirola. Lugar que conserva intactos algunos arcos de medio punto y se puede adivinar la estructura urbana existente hasta el tratado de expulsión y su consiguiente abandono.
Continuamos por senda poco transitada hasta situarnos en la parte superior del Barranc de Condoig. Desde aquí hay que descender por una senda bastante desgastada hasta el lecho del mismo. No es nada sencillo bajar por estos caminos, pero ya he dicho otras veces que estos niños y niñas suben y bajan por donde sea.
Debido a una copiosa nevada, el fondo del barranco es un caos de árboles partidos y, en consecuencia, el sendero está bastante "oculto". Tuvimos que tirar de la tecnología más antigua de todas. Un par de nosotros de avanzadilla a buscar el camino, no hay otra. Una vez llegamos a terreno algo más abierto, el sendero comienza a subir por las paredes del barranco, hasta volver a una pista que nos supo a gloria. Desde aquí solo quedaba volver a Beniaia. Fotos AQUÍ.
Como bien está lo que bien acaba, nos quedaba la ¡¡BARBACOA CAYÚ!! Aquí algunos se destaparon como verdaderos maestros de la brasas. ¡Qué bueno todo! Lástima que no tenga fotos de la comilona, pero os dejo ESTAS OTRAS. ¡Qué manera de disfrutar! Algunas parejas contrincantes en el pañuelo ya han quedado como encuentros clásicos.
Y hasta aquí el FIN DE SEMANA del XX CAYÚ. Si otras veces hemos destacado el aguante de los chavales en las excursiones, en esta me gustaría destacar la labor de los adultos. Cada uno ha aportado su granito de arena en lo que podía o sabía. Logística, entretenimiento, disfraces, bebida, música, ... Un diez para todas y todos, muchas gracias. También quisiera agradecer los desvelos de Isabel, la Reina Cantacuc. Ha estado pendiente en todo momento de nosotros y lo ha hecho todo más fácil. Hasta la próxima.

Como no quiero perder la costumbre del libro recomendado, en esta ocasión quiero hacerlo con un libro perfecto para las fechas en las que estamos:
ANATOMÍA DE UN INSTANTE de Javier Cercas.
Random House Mondadori, S.A. 2009