De nuevo Cayú vuelve a la comarca valenciana de La Serranía. Después de un par de días fríos y lluviosos, el domingo amaneció completamente despejado. Aras de los Olmos se encuentra a 936m de altitud y cuando llegamos la temperatura no era muy alta, aunque el cielo estaba limpio y podíamos disfrutar de una gran visibilidad.
Después de almorzar iniciamos la marcha siguiendo las marcas del SL-V22 por el camino conocido como el de La Hoya y Loma Tomás. Abandonamos la población entre campos de cultivo y alguna construcción aislada hasta adentrarnos en el barranco de la Travenilla. El terreno cárstico por el que caminamos favorece la formación de estos barrancos e iremos cruzando también el del Tornajuelo y el de las Tejerías. Al llegar al Molino de la Jarra todos ellos confluyen en el primer destino de nuestra ruta: el Barranco del Regajo.
Durante buena parte del día nos mantuvimos dentro del barranco lo que hizo bastante divertida esta pequeña aventura. Algunas veces era sencillo vadear el río pero en otros casos las recientes lluvias y el barro acumulado lo hacían más "plástico" (je je je). El sendero local termina donde se une al GR-37. En este punto podemos tomar la dirección Sur hacia Titaguas o la norte hacia nuestro destino Aras de los Olmos. Elegimos por tanto esta segunda opción.
Esta parte del sendero de gran recorrido pertenece a la extensa red de vías pecuarias de la comarca y recibe el nombre de Senda del Contador.
"...el topónimo Contador se refiere, en este caso, a un paso estrecho al pie de unos abrigos rocosos, por el que ineludiblemente tenían que pasar, una a una, las reses; este hecho era aprovechado por los pastores para hacer el recuento." Del libro GR-37 Vías pecuarias. Teresa Casquel, Editado por C.E.V. Papers de Muntanya.
Una vez fuera del barranco paramos a comer en una zona arbolada junto a una pista. El sendero de gran recorrido continúa ascendiendo hasta que llegamos a una bifurcación. En este punto podemos seguir las marcas rojas y blancas hacia Aras o bien tomar las indicaciones del PR-CV 307.
Estas últimas fueron las que tomamos para acercarnos hasta el denominado Pino Rebollón. Magnífico ejemplar que nos acogió bajo sus ramas para un merecido descanso. Desde este punto el sendero desciende lentamente hasta llegar a Aras de lo Olmos.
